Residuos de construcción y demolición

residuos de construcción y demolición

Prácticamente cualquier actividad que se realiza hoy en día genera una serie de residuos que deben ser tratados de una manera determinada. La normativa se ha vuelto cada vez más exigente con el paso de los años y eso ha sido realmente beneficioso a la hora de cuidar todo aquello que nos rodea. Hoy en día las empresas ya no pueden actuar como lo hacían antes, prácticamente desechando los residuos en cualquier punto y sin pensar el daño que podrían estar causando. Todavía quedan muchas cosas por hacer, pero la tendencia en responsabilidad y buen hacer es realmente positiva. Sin embargo, son muchos los que todavía no tienen claro cuáles son los diferentes tipos de residuos que deben ser gestionados de un modo exigido. En caso de no ser así, una corporación puede verse envuelta en importantes sanciones y, en el peor de los casos, en el fin de su desempeño. ¿Quieres conocer algo más sobre los residuos de construcción y demolición? Presta atención a todo lo que vamos a contarte en esta publicación.

Descubre todo sobre los residuos de construcción y demolición 

Lo primero es dejar claro qué son los residuos de construcción y demolición, conocidos como RCD. Como suele ser habitual, se trata de cualquier componente, sustancia u objeto que cumpla con la condición de residuo, es decir, que sea reconocido a la hora de ser tratado de un modo concreto con respecto a la gestión de residuos en el momento de desecharlo. En los RCD se cuenta con la particularidad de que estos residuos vienen derivados de la propia actividad que se realiza en el sector de la construcción. Si te fijas, en cualquier obra, reforma o traslado se suelen generar residuos de materiales muy diversos y deben ser tratados en la planta correspondiente de cara a cumplir con lo exigido en la normativa legal vigente.

Dentro de los residuos de construcción y demolición encontramos tres categorías. En la primera estamos hablando de esos residuos que están compuestos por sustancias peligrosas. En la categoría número dos nos encontramos con los residuos inertes de construcción y demolición sucio, que son los que no han sido seleccionados en su origen y que no son fáciles de valorar al presentarse en una mezcla heterogénea de residuos inertes. Por último, encontramos los más comunes como pueden ser diferentes materiales como hormigón, ladrillos o piedras. En esta tercera categoría llegamos a los más utilizados en la construcción. 

¿Tenías alguna duda sobre los RCD? Desde ZincApp esperamos haberte ayudado a tener todo más claro. Lo que sí puedes tener perfectamente controlado son los datos sobre los residuos generados. No pierdas la oportunidad de hacerte con nuestro software de gestión de residuos y da un paso adelante en calidad y facilidad en tu trabajo.  

 

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